Lubricantes

En los últimos años, el uso de lubricantes íntimos ha experimentado un aumento significativo, casi equiparable al uso del preservativo. A pesar de que aún existe cierta reticencia a hablar del tema, el uso de estos productos puede transformar por completo las relaciones sexuales.

Aunque la mayoría de las personas los usan únicamente para facilitar la penetración, es verdad que existen otras posibilidades. Explora todas sus ventajas y dale un impulso a tus encuentros íntimos.

Qué son los lubricantes sexuales o íntimos

Los lubricantes sexuales son geles diseñados para lubricar los genitales y prevenir la fricción, el dolor y los accidentes durante las relaciones sexuales. La mayoría de los lubricantes se componen de agua, con el fin de evitar el uso de sustancias químicas en las zonas íntimas y prevenir la aparición de efectos secundarios.

En general, son especialmente útiles cuando la mujer no produce suficiente lubricación natural y esta carencia tampoco puede ser compensada por el líquido preseminal producido por el hombre.

¿Para qué se utilizan los lubricantes sexuales?

La guía aborda diversos temas, entre ellos el uso de lubricantes, pero ¿cómo podemos sacar el máximo provecho de sus beneficios? A continuación, te lo explicamos.

Algunas mujeres se ven en la necesidad de recurrir a los lubricantes para solucionar problemas de sequedad vaginal o para facilitar la penetración durante las relaciones sexuales. Los lubricantes íntimos pueden hacer que la penetración sea más suave y placentera, lo que permite disfrutar a ambas partes de la pareja. Sin embargo, este producto tiene además otros usos que son fundamentales para mejorar la salud y la vida sexual de los involucrados.

Existen múltiples razones por las que cualquier persona (sea hombre, mujer, trans, gay, lesbiana, pansexual, bisexual…) puede optar por utilizar este producto en sus encuentros íntimos. Además de para la penetración vaginal, también se puede usar para el sexo anal, una zona delicada que requiere lubricación adecuada y dilatación para disfrutar de la experiencia.

No se puede obviar que los “cuernos” de algunos Unicornios pueden parecer atractivos a la vista por su gran tamaño pero en la práctica es preferible usarlos conjuntamente con lubricantes. Por ello, el tamaño del pene, el ano o la vagina implicados pueden hacer necesario el uso de lubricante casi de forma obligatoria. En estas situaciones, el lubricante facilitará la penetración y reducirá las molestias.

Y  por qué no decirlo, aquellxs cuya curiosidad no tiene límites y quieren explorar su vagina o/y ano y ver hasta qué punto entra aquello….

Y por su puesto para aquellas mujeres u hombres que quieren iniciarse en el sexo anal… siempre es mejor iniciarse en el sexo anal con la compañía de un buen lubricante. También hay quienes simplemente lo usan para experimentar y divertirse en la cama.

Si todavía no has utilizado ningún gel íntimo en tus encuentros sexuales, es importante que sepas que el simple hecho de añadir este producto puede mejorar la calidad del sexo con tu pareja (e incluso en solitario) de forma rápida y sencilla. Además, podrás jugar y experimentar con tu pareja para que la experiencia sea aún más placentera.

Debes conocer los diferentes tipos de lubricantes íntimos

Es importante señalar que no se recomienda el uso de lubricantes caseros. Productos como la vaselina o las cremas hidratantes pueden alterar el pH vaginal y causar molestias como picazón e irritación.

Lo recomendable es optar por alguna de las presentaciones disponibles en farmacias y tiendas especializadas en artículos sexuales.

Lubricantes formulados a base de agua.

Los lubricantes a base de agua son los más recomendados para disminuir la sequedad vaginal causada por los desequilibrios en los niveles de estrógenos. Estos lubricantes son fáciles de limpiar, no causan manchas y son seguros cuando se utilizan en conjunto con preservativos.

Es importante tener en cuenta que estos lubricantes deben aplicarse en periodos prolongados, ya que tienden a secarse. Además, no se deben utilizar cuando hay contacto con agua (por ejemplo, al tener relaciones sexuales en la ducha), ya que se diluyen con facilidad.

Lubricantes formulados a base de aceite.

Estos lubricantes están elaborados a base de grasas vegetales, como las derivadas del aceite de oliva y maíz. Aunque alguna vez fueron populares, hoy en día su uso no se recomienda tanto. A pesar de ofrecer una lubricación prolongada, pueden provocar manchas en la ropa y las sábanas.

Lo más preocupante es que dañan el látex de los preservativos y aumentan el riesgo de roturas. En muchos casos, también pueden favorecer la aparición de infecciones vaginales debido a su impacto en la flora vaginal.

Lubricantes formulados a base de silicona

Los lubricantes sexuales a base de silicona son una opción más espesa y duradera en comparación con los lubricantes a base de agua. Se recomiendan para el sexo anal o para encuentros sexuales en el agua, ya que no se diluyen con facilidad. Sin embargo, pueden ser más difíciles de limpiar y no se deben utilizar con juguetes sexuales fabricados con silicona, ya que pueden dañarlos.

Existen otros tipos de lubricantes íntimos disponibles en el mercado.

Los lubricantes mencionados anteriormente son los más populares, pero hay otras variedades que es importante conocer. Es fundamental verificar sus componentes, ya que algunas de estas versiones pueden causar efectos indeseados, a pesar de ser estimulantes.

– Lubricantes térmicos: son ideales para despertar sensaciones en la piel de todo el cuerpo, pero no se recomiendan para lubricar la vagina.
– Lubricantes estimulantes: contienen sustancias como la arginina y mentol que facilitan la estimulación del clítoris.
– Lubricantes untables: se pueden adquirir en forma sólida o gel y algunos tienen sabores y son comestibles.
– Lubricantes en supositorio: diseñados para los hombres que quieren explorar su punto “P”.
– Lubricantes con feromonas: cuentan con componentes que potencian el deseo sexual.
– Lubricantes ecológicos: contienen componentes hipoalergénicos para aquellos que suelen tener alergias.

¿Qué ventajas ofrece el uso de lubricantes?

Hemos hablado de los beneficios de los lubricantes para facilitar la penetración, pero hay otros aspectos positivos que también se pueden destacar:

– La exploración de nuevas sensaciones. Los lubricantes pueden proporcionar diferentes sensaciones, como frío o calor, lo que puede generar un ambiente diferente y propiciar la experimentación de nuevas sensaciones durante el encuentro íntimo.

– La prolongación del encuentro sexual. Los lubricantes no solo facilitan la penetración, sino que también pueden ayudar a prolongar los preliminares y a crear un ambiente más íntimo y sin prisas que pueda durar varias horas.

¿De qué manera se deben usar los lubricantes sexuales?

Existen diversas maneras de utilizar los lubricantes íntimos para conseguir un mayor placer:

– Durante los preliminares: se puede aplicar una pequeña cantidad en la palma de la mano y masajear suavemente la vulva y los labios, explorando diferentes sensaciones.
– Calentándolo: es importante calentar el lubricante antes de su uso, por lo que se puede hacer a partir de cualquier contacto o fricción cuerpo a cuerpo.
– No hay una forma incorrecta de usar un lubricante. Se puede aplicar directamente sobre el cuerpo, el pene o el preservativo, pero es recomendable usar una cantidad adecuada, del tamaño de una moneda de dos céntimos, para evitar que gotee excesivamente y reduzca la fricción y el tacto.
– También se pueden utilizar con juguetes sexuales para mejorar la experiencia y evitar la fricción incómoda.
– Asimismo, se pueden combinar con otros productos, como geles estimulantes o preservativos con texturas, para crear sensaciones únicas durante el encuentro sexual.
– Selecciona el lubricante adecuado. Cada lubricante íntimo es diferente en cuanto a ingredientes y consistencia. Los lubricantes más espesos son ideales para sexo anal, uso con juguetes sexuales y sexo en el agua. Por otro lado, los lubricantes más líquidos, a menudo a base de agua, son apropiados para la penetración vaginal o el sexo oral.
– Mejora tus orgasmos con lubricante. Durante las relaciones sexuales con un hombre, puedes aplicar unas gotas de lubricante en su perineo, que es un área muy sensible entre el escroto y el ano. Justo antes de que alcance el clímax, toca suavemente el área lubricada con los dedos y prepárate para llevarlo al límite.